MI PLEGARIA

Padre nuestro que estas en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu reino, hágase tu voluntad aquí en la tierra como en el cielo, para que me digas, por qué ella ha dejado de notar mi presencia en sus brazos, si yo la amo mas que a nada en esta vida, permite que recuerde sinceramente nuestro amor hermoso vivido de ayer, dándome el pan negado de sus besos en mis labios cada día al despertar...,

Señor perdona mis ofensas como yo le perdono los de ella, no permitiéndole caer en tentación por este desamor vivido en su mente y sentido en su corazón, librándola a ella como a mí de todo mal...,

Padre mío que estas en esos bellos cielos azules, escucha esta plegaria que he escrito de todo corazón, aunado al mayor respeto, elevándola con esperanzas a ti no olvidándola, para que nos puedas mirar con la paz y amor de tus ojos desde las alturas y con tu sabiduría de justicia, nos puedas entregar tu perdón con la bendición, porque tal vez, podríamos ser pecadores hoy de pensamiento, pero siempre seremos tus hijos en la tierra. Amen.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 21/08/2008 09:00 AM.