sábado, 15 de octubre de 2011

TÚ, solo, TÚ

Tú, solo, tú, conoces, en la mirada lánguida, lo que nadie entendería, escuchando tras bastidores y mas, si el dolor sufrido del alma en soledad, es padecido por soledad en cuerpo ajeno, a causa de un imposible, que a pesar de todo, me niego a aceptar y es por eso, que pido perdón, por solo pensar en mí, pero si por los años de convivencia en tu vida, fuera, pienso que por derecho adquirido al menos abría algo de tiempo por espacio de razón por existencia, como para poder decir, lo siento, notando mi presencia sinceramente olvidada, frente a ti...,


Tú, solo, tú, conoces, mi forma de pensar, como la de llorar en tus brazos, cuando las cosas no marchaban bien y ahí, siempre estuviste presente, amada mía, mi gentil compañera, confidente, brindándome tu franco hombro, diciéndome suave y cariñosamente al oído, no te preocupes mi amor, ven, duerme tranquilo, que para mañana, cuando amanezca y despiertes, esas cosas indescifrables de hoy, te saldrán, mejor, porque nada, era inalcanzable en la vida, si estabas Tú, a mi lado, para con un beso, escuchando la paz de tu sonrisa, hacerme finalmente, dormir...,


Tú, solo, tú, conoces, mis secretos, que son las añoranzas, viéndote a ti, tranquilamente dormir, mujer de los eternos desvelos de mi silencio, cautivo, con dos lágrimas de tristezas recorriéndome lentamente el rostro, una por ti, presente dentro de mi corazón y otra por mí, ausente del inconmovible, tuyo, hincado de rodillas como ayer a un lado de la cama, mordiéndome los labios hasta casi verlos sangrar, cada vez, con más grande sollozos de la impotencia, por no querer gritar tu querido nombre a los cuatro vientos, pudiéndote, hacerte, despertar.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 15102011 04:00 PM.

MIENTRAS te PIENSO

Mientras te pienso, mas dolor causas internamente, pero no acotarte en algo del día, sería negar una parte de mi vida, al ser Tú, una razón por existencia del amor, cuando tuvo sus momentos más divinos y queridos por detalles sentidos, para recordar...,

Recordar, mientras te pienso, la tristeza pudiera convertirse en lágrimas de sensible ausencia, que correrían lentamente por el rostro sin poderlas contener, escuchando solo silencios de soledad, que luego dejarían heridas abiertas para el corazón, por sufrimiento...,

Sufrimiento, mientras te pienso, es tener sublimes añoranzas reflejadas por el alma en mis ojos, al intentar soñar despierto, buscando desveladamente un regreso, para lo que no tiene salida, que alivie este mal oscuro, que reescribió, nuestro destino...,

Destino, mientras te pienso, seria de rodillas, pedirle a Dios, el poder sacar esta profunda nostalgia que ahora vive en mi, concediéndome esa paz tan anhelada, que contigo Yo perdí, para así, con el tiempo y espacio de curación, quizás, olvidarme de ti.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 09102011 09:00 PM.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

MÉDICO de GUARDIA

Era un fin de semana como tantos que habían transcurrido, sin tiempo por espacio para el amor, Él siempre la esperaba después de las guardías en el hospital con los brazos abiertos y una sonrisa en los labios, pero ELLA le decía estoy muy cansada y nuevamente un día mas perdido, dentro de su esperanza de poderla amar, donde si acaso teniendo la mejor suerte, lograba el beso de rigor apuradamente, antes de verla recostarse lentamente a la cama quedando profundamente dormida, arropándola mientras le acariciaba suavemente la frente y sus lágrimas de ganas enfriaban su corazón enamorado, observándola en silencio, hasta dejarla finalmente sola, apagando luego la luz de la lamparita de noche, donde retornaba a los oficios de la casa...,

Pasaron los meses y ese mismo silencio característico en ÉL por respeto, fue creando una barrera invisible en su mente, pensando que lo vivido en el pasado, jamás podría ser presente en la piel, para un futuro mejor y sus labios resecos no se volvieron abrir, para decirle, TE AMO, una mirada en la distancia recibió ELLA con ojos rojos y humedecidos que finalmente llamaron tardíamente su atención, preguntándole que le pasaba y ÉL no le respondió, solo la miró una vez más profundamente, reflejando entre tristezas de su alma la despedida de la que jamás quiso saber su existencia, pero el amor es como una flor que llega a marchitarse, sino recibe calor, con atención...,

Un día desde las aceras opuestas de un destino escrito, se vuelven a ver, pero ahora no es ÉL, quien solo llora, ELLA también lo hace mordiéndose sus labios rosados, los separa un fracaso y una desilusión por el resto de sus vidas al no haber evaluado y juntos lo que con dolor de olvido ocurría a su alrededor, por dejadez quizás, al darle más importancia a una profesión con sus guardías, que a los valores espirituales y humanos, siendo tarde ya para entender, lo que la mirada encerraba como un llamado urgente, TE NECESITO aquí y ahora, durante tantos años de convivencia.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 08032010 12:45 PM.

LÁGRIMAS caen en mis MANOS

Intentando retener sentimientos del ayer, deslizándose entre los dedos lentamente, carenando irremediablemente a las arenas perdidas de los espacios sin tiempo de amor que la soledad del desamor ha deparado para mí, por este absurdo silencio que hasta hoy, Tú demuestras sin cambios, al no anhelar notar nunca más, mi presencia recordada en tus brazos...,

Reflejando el olvido de todo lo vivido y sentido en la piel durante tantos años juntos, carcomiendo momentos divinos y latientes del corazón, que fueron detalles por aquellas dos personas amables, que siempre se amaron con una sonrisa un beso y una flor, cuando la palabra amor, fue razón de su existencia en la mirada, cada amanecer al despertar.
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Sergio Yglesias Garcìa
Caracas, 08032010 11:00 AM.

Amor mira a mis OJOS

Como los mirabas ayer, sin distancia, aunque sea en silencio, así sabré que no estoy solo en el mundo, pudiendo recordar el preciso instante del momento sentido del corazón, cuando a través de la mirada hoy esquiva, me enamoré perdidamente de aquellos bellos ojos glaucos, como solo se enamora un hombre sinceramente por una hermosa mujer,

Sonriéndome como sonreías en el pasado al despertar en mis brazos, con brillantes perlas blancas, no pretendo mas, que alegrar un alma triste llena de olvido, por todo lo vivido en la piel, durante tantos años, juntos,

Escuchándome algunas veces, antes de pretender hablar Tú siempre, con el tiempo y mí espacio dedicado, frente a ti y te asevero, que Yo creceré, creceré en verdad, con sentimiento y amor, dentro de tu corazón inconmovible.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 05032010 02:00 PM.

TENGO

Una espina enconada por desamor en el corazón, que se introduce cada día de ausencia un poco más profundamente, podría desangrarme mañana copiosamente en tu mirada, con lágrimas del alma que reflejaran en mis ojos, sinceras tristezas que no tienen explicación, al verte siempre tan callada, por no querer notar mi sentida y recordada presencia de ayer en tus anhelados brazos, al despertar, teniéndome frente a ti,

Hoy, lo que no debería padecer a tu lado, penas en silencio, que saben en labios resecos y partidos en espacios sin tiempo de amor a dolor de olvido, redescubriendo al despertar la eterna realidad que me niego aceptar, pero que recojo más tarde calmadamente convertidas en cenizas de un pasado para intentar continuar solo en el presente, abandonado en tinieblas de noches marcadas e interminables, como un destino escrito de desvelos por la mujer amada, sin tener nunca ninguna orientación por luz en sus hermosos glaucos, porque Yo, aunque no lo creas, sí, tenía un corazón para vivir amando, sin tener que sobrevivir ahora, sufriendo en soledad.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 01032010 03:30 PM.

LLEVO

Una lágrima colgada del alma que refleja en mis ojos la amarga soledad de ausencia que me ha tocado vivir, al Tú no querer notar mi sentida presencia frente a ti, en la búsqueda incesante de ese beso negado ayer en tus brazos, aunado a las flores que cada amanecer porto esperanzado, pero que se marchitan tristemente ignoradas en mis temblorosas manos a la espera de un despertar, distinto, viendo al nuevo mundo blanco de luz, amor y paz, que he construido, solo para ti, pero te juro, que a veces ya no sé que mas hacer por lograr la atención, al verte tan callada volteada hacia la pared, fingiendo o no, el siempre dormir...,

La cruz marcada del desamor en el corazón latiente, son huellas de un pasado que marcaron el destino que he de llevar como castigo en el presente, escribiendo en aires de desvelos, sueños por añoranzas divinas que luego se disiparan como igual nacieron, de recuerdos queridos por la mente al no dejarte de pensar nunca, en lento y doloroso silencio de olvido.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 01032010 01:30 PM.