Entre ausencia y olvido, se gestan en una noche lluviosa, los mas grandes recuerdos de un amor, hecho poesías, como añoranzas divinas que hacen bien a un corazón solitario, para que en tiempos de sentir la soledad, no crezca aun mas profundo en la mente, los espacios vacíos y perdidos de amar, por el silencio y castigo que ha de vivir un alma en pena, sumida en las tinieblas de las noches, sin ninguna orientación, al tú no querer notar, mi presencia de ayer en tus brazos.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 21/05/2009 03:00 PM.
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