Lentamente cada amanecer de despertar en soledad, reviviendo recuerdos queridos gracias a aquel álbum de fotos que olvidaste por el apuro de recoger del baúl en el viejo ático, cuantas páginas enteras retuvieron momentos felices unidos en un solo pensamiento compartido como destino trazado, que pensamos alcanzaríamos tomados de las manos, como dos eternos enamorados, haciendo historia…,
Pero los espacios de vacios sentidos por el corazón, aun quedan latientemente dolientes, cual espina enconada, que desangra sentimientos encontrados en forma de lágrimas, reflejadas por el alma en tristes ojos que lloran en silencio la ausencia, reclamando tu presencia, para poder ver ese color de vida que con amor mostraban libremente tus hermosos ojos glaucos, escuchando la paz de esa sonrisa que mis sueños realizaba, viendo tus bellos dientes de perlas brillar y tu largo cabello de oro ondear suelto al viento…,
Solo lágrimas quedan, rodando y rodando, sin parar por el rostro, añorando ese amor que se ha perdido, al Tú no querer notar mi presencia aquella noche de Abril, en que con los brazos abiertos, arrodillándome a tus pies, llegué una vez más, para decirte sinceramente, “QUE AUNQUE AMAR, ERA NO TENER DECIR NUNCA, LO SIENTO “, Yo, por ese mismo AMOR que olvidaste, diría una sola palabra mas hoy, sentidamente arrepentido, “ PERDÓNAME “.
---------------------------------------------------
Sergio Yglesias García
Caracas, 19/11/2009 10:30 AM.
No hay comentarios:
Publicar un comentario