Reflejando en distantes rostros, una verdad vivida hoy cautiva, serenamente oculta de las sombras por huellas profundas de un pasado que nadie quisiera recordar pisando nuevamente, pero que es nuestro, así lo queramos negar siempre, al no desear notar nuestra presencia, nunca...,
Dejando aromas por tristezas en el aire, con distintas estelas de dolor sentido en el alma, por ausencia en los brazos, cada amanecer al despertar de silencio sepulcral…,
De lo que fuimos ayer, por esas dos personas amables, a lo que son ahora de lejanas, sin tiempo y espacio para poder evaluar lo ocurrido, aplicando lo aprendido, de todos estos años juntos, por este fracaso que fue la marca imborrable por desilusión de los dos al mirarnos, pero con olvido.
Dejando aromas por tristezas en el aire, con distintas estelas de dolor sentido en el alma, por ausencia en los brazos, cada amanecer al despertar de silencio sepulcral…,
De lo que fuimos ayer, por esas dos personas amables, a lo que son ahora de lejanas, sin tiempo y espacio para poder evaluar lo ocurrido, aplicando lo aprendido, de todos estos años juntos, por este fracaso que fue la marca imborrable por desilusión de los dos al mirarnos, pero con olvido.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 15/10/2009 04:00 PM.
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